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29 agosto, 2011

La trata de personas es un delito


El tráfico de personas es un fenómeno global que crece rápidamente

Me ofrecieron empleo en un restaurante en la Capital, a casi 400 km de mi casa. Como en mi pueblo no había trabajo, acepté. Me adelantaron $200 y me dieron el pasaje en ómnibus. Cuando llegué a la dirección que me habían dado, me dijeron que el restaurante era a unas cuadras, y me llevaron en auto. Pero cuando llegamos, no era una parrilla: era una Whiskería. Me encerraron, me pegaron, me violaron y me obligaron a prostituirme. Además me dijeron que si le decía a alguien, esto mismo se lo harían a mis hijas, ya que sabían donde vivían. Nunca pensé que me pudiera pasar una cosa así.

El “coyote”, es aquella persona encargada de secuestrar mujeres, engañarlas y maltratarlas, para luego trasladarlas a un sitio en donde ejercerán la prostitución, sometidas a la esclavitud.

El Ministerio de Justicia Seguridad y Derechos Humanos, define ala Tratade blanca, como “la captación, el transporte, traslado, acogida o recepción de personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra  con el fin de abusar de ella. La explotación incluye la prostitución ajena u otras formas de explotación sexual, trabajos o servicios forzados, la esclavitud o las prácticas análogas a la esclavitud, la servidumbre o la extracción de órganos.”

El 25 de diciembre de 2003 el Estado sancionó un protocolo, con el fin de aplicar una ley que frene la trata de personas, reduzca el poder y la influencia de los grupos delictivos organizados que abusan de los individuos.

El protocolo establecía pleno control de las fronteras y el poder Judicial por la que obliga a los Estados a penalizar a los proxenetas, apoyar la responsabilidad del Gobierno para las investigaciones, enjuiciar y condenar a los traficantes, aplicar sanciones para los condenados acordes al delito provocado, ampliar la protección a la víctima, garantizando seguridad, proporcionando información legal, recuperación física y psicológica, y garantizarles el retorno a su país de origen en caso que las mujeres procedan de otra nacionalidad.

Más tarde el 29 de abril de 2008 se aplicó la ley contra la trata, bajo la sanción 26.364. Si bien desde su puesta en vigencia hasta la actualidad han sido rescatadas 753 víctimas según documentos brindados por el Estado. La ley sostiene un máximo de cinco años para los condenados, sin distinción del grado de delito provocado, como también considera no trata de personas, los casos de mayores de 18 años en los que sostiene que hay un presunto consentimiento de la víctima.

Esos y varios puntos de la ley, difieren con los principios planteados por las Organizaciones, ONGs, Instituciones y Asociaciones que ayudan a víctimas de trata y violencia de género. Ante la disconformidad masificada, las agrupaciones decidieron unirse frente al Congreso los días 3 de cada mes con el objetivo de “(…) reclamar por la re-sanción de la ley, por las mujeres desaparecidas, denunciar la complicidad de la trata, y exigir al Estado que aparezcan las víctimas, como también demostrar la ineficiencia del aparato Judicial frente a estos hechos”, así lo precisó,la  Licenciada LucreciaAnsalde, deLa Casadel Encuentro.

Lucrecia sostiene que es el Estado el responsable principal de contribuir con el mejoramiento social, con la eliminación la delincuencia, la prostitución y el tráfico de drogas, entre otras.

Por su parte Viviana Caminos, coordinadora dela Red Nacional  Alto al Tráfico,La TratayLa Explotación SexualComercial de niños, niñas y adolescentes, (RATT) asegura que “las redes son una mafia y nunca van a caer porque hay de por medio intereses creados, cómplices funcionarios, políticos, policías, el poder Judicial y el Político en su conjunto”, manifestó Caminos.

Al igual que lo afirmó Lucrecia; “Detrás de la trata de personas hay gente poderosa y por eso nunca va a caer (…), El Gobierno tendría que brindarles apoyo y contención a las víctimas y no lo hace, no cuenta con infraestructura para hacerlo y tampoco le conviene, porque son ellos los que están detrás de las redes (…) Cuando muestran que cae una red, es todo pantalla, rescatan a un par de chicas, y a la semana ese prostíbulo sigue funcionando. Además no ayudan a las víctimas liberadas, entonces vuelven a caer o en la misma red u en otra.”

El tráfico de personas es un fenómeno global que crece rápidamente y que afecta a países y comunidades de todo el mundo. El mismo involucra el manejo de personas con fines comerciales y lucrativos. Los tratantes forman  parte de redes criminales organizadas, en la que realizan una actividad ilegal, la violación de género y de los Derechos Humanos.

Son varios los miembros que conforman las redes. Entre ellos se encuentra los encargados de identificarlas y reclutarlas, luego está el que gestiona y financia su traslado (al interior u exterior del país.), los dueños administradores regentes de los lugares donde las explotan o alquilan a terceros a cambio de una renta, entre otros.

Los criminales se aseguran mediante el uso de la fuerza, la amenaza, el engaño y la violencia que las víctimas no puedan escaparse de la esclavitud. Sometiendo a las mujeres en un  “primer periodo, el de ablandamiento, en el cual les retienen los documentos, les cambian la identidad, les cortan el pelo, las tiñen, les borran todo su pasado y las someten a continuas violaciones de todo tipo, a través de golpes y quemaduras provocan un destrozo total de la persona. En cuanto a lo psíquico, manifiestan sentimientos de paranoia, depresión, ansiedad angustia, y en lo físico; marcas, quemaduras, cicatrices, golpes internos y externos, debido a que las patean, las obligan abortar a golpes, le destrozan el aparato reproductor femenino y las fuerzan a no cuidarse, ante esto contraen enfermedades de transmisión sexual, de todo tipo,” aseguró el doctor Marco Antonio Gramegna, Jefe del Servicio de Lucha Contrala Tratadela OIM.

Por su parte la licenciada Ansalde, manifestó que otros problemas que contraen son de adicción. “Les exigen consumir a diario grandes dosis de drogas y alcohol, para que el cuerpo resista todo el día y poder atender entre 30 y 40 hombres por noche”. Y explicó; “hay redes de trata, porque hay consumidores, todos son cómplices, desde los medios con la publicación del rubro 59, la sociedad, que ve los papelitos pegados en los teléfonos públicos en los que se ofrecen mujeres y los hombres se sirven de ellos, como si la mujer fuera una cosa, un servicio para ser consumida por el varón. (…) Es por ello que cuando una red cae las mujeres vuelven a entrar al negocio de la trata, porque no hay asistencia y  tratamientos, entonces ellas dicen; -esta es mi vida, yo soy una cosa, solo sirvo para esto”- Las víctimas no logran reinsertarse, porque en la sociedad hay un desprecio constante.

La Oficinade Rescate y Acompañamiento a Personas Damnificadas por el Delito de trata, comunicó que trabajan a diario en el asunto, y desde el 2009 hasta el actual año hubo un incremento de liberación de mujeres, caídas de redes, allanamientos y  detenidos. A pesar de ello,la LicenciadaLucrecia, en disconformidad asegura, que “los datos oficiales que brinda el Estado están manipulados. Mientras menos se muestra, eso no existe, se dice que es mentira,  desalojan redes, y a la semana vuelven a funcionar. Es por ello que nunca hay datos precisos, ni sobre las redes, ni sobre las mujeres liberadas.”

La OIM afirma que a nivel mundial, se estima que más del 90% de las víctimas de trata, de explotación sexual, son mujeres, niñas y adolescentes con bajos niveles de escolarización, pertenecientes a grupos familiares numerosos o con necesidades básicas insatisfechas, donde la mayoría de sus integrantes se encuentran desocupados o realizan actividades primarias no calificadas por las que perciben ingresos extremadamente bajos. Existieron casos de secuestros de clase media-alta, pero por la movilización que ello podría ocasionar dentro del país son enviadas al exterior.

La trata de personas es un delito de difícil visibilización porque ocurre en circuitos clandestinos y hay muchos poderosos involucrados e intereses de por medio. A esto se suma que los familiares de las víctimas no denuncian por temor a las represalias. Es importante que la opinión pública esté informada y prevenida al respecto, así como es crucial el rol de los medios de comunicación en la concientización de este problema y sus consecuencias, para decir ¡Basta a las redes de trata!, los seres humanos no estamos en la categoría de objeto de intercambio económico.

 



El tráfico de personas es un fenómeno global que crece rápidamente

 Me ofrecieron empleo en un restaurante en la Capital, a casi 400 km de mi casa. Como en mi pueblo no había trabajo, acepté. Me adelantaron $200 y me dieron el pasaje en ómnibus. Cuando llegué a la dirección que me habían dado, me dijeron que el restaurante era a unas cuadras, y me llevaron en auto. Pero cuando llegamos, no era una parrilla: era una Whiskería. Me encerraron, me pegaron, me violaron y me obligaron a prostituirme. Además me dijeron que si le decía a alguien, esto mismo se lo harían a mis hijas, ya que sabían donde vivían. Nunca pensé que me pudiera pasar una cosa así.

El “coyote”, es aquellas personas encargadas de secuestrar mujeres, engañarlas y maltratarlas para luego trasladarlas a un sitio en donde ejercerán la prostitución, a través de la esclavitud.

El Ministerio de Justicia Seguridad y Derechos Humanos, define ala Tratade blanca, como “la captación, el transporte, traslado, acogida o recepción de personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra  con el fin de abusar de ella. La explotación incluye la prostitución ajena u otras formas de explotación sexual, trabajos o servicios forzados, la esclavitud o las prácticas análogas a la esclavitud, la servidumbre o la extracción de órganos.”

El 25 de diciembre de 2003 el Estado sancionó un protocolo, con el fin de aplicar una ley que frene la trata de personas, reduzca el poder y la influencia de los grupos delictivos organizados que abusan de los individuos.

El protocolo establecía pleno control de las fronteras y el poder Judicial por la que obliga a los Estados a penalizar a los proxenetas, apoyar la responsabilidad del Gobierno para las investigaciones, enjuiciar y condenar a los traficantes, aplicar sanciones para los condenados acordes al delito provocado, ampliar la protección a la víctima, garantizando seguridad, proporcionando información legal, recuperación física y psicológica, y garantizarles el retorno a su país de origen en caso que las mujeres procedan de otra nacionalidad.

Más tarde el 29 de abril de 2008 se aplicó la ley contra la trata, bajo la sanción 26.364. Si bien desde su puesta en vigencia hasta la actualidad han sido rescatadas 753 víctimas según documentos brindados por el Estado. La ley sostiene un máximo de cinco años para los condenados, sin distinción del grado de delito provocado, como también considera no trata de personas, los casos de mayores de 18 años en los que sostiene que hay un presunto consentimiento de la víctima.

Esos y varios puntos de la ley, difieren con los principios planteados por las Organizaciones, ONGs, Instituciones y Asociaciones que ayudan a víctimas de trata y violencia de género. Ante la disconformidad masificada, las agrupaciones decidieron unirse frente al Congreso los días 3 de cada mes con el objetivo de “(…) reclamar por la re-sanción de la ley, por las mujeres desaparecidas, denunciar la complicidad de la trata, y exigir al Estado que aparezcan las víctimas, como también demostrar la ineficiencia del aparato Judicial frente a estos hechos”, así lo precisó,la  Licenciada LucreciaAnsalde, deLa Casadel Encuentro.

Lucrecia sostiene que es el Estado el responsable principal de contribuir con el mejoramiento social, con la eliminación la delincuencia, la prostitución y el tráfico de drogas, entre otras.

Por su parte Viviana Caminos, coordinadora dela Red Nacional  Alto al Tráfico,La TratayLa Explotación SexualComercial de niños, niñas y adolescentes, (RATT) asegura que “las redes son una mafia y nunca van a caer porque hay de por medio intereses creados, cómplices funcionarios, políticos, policías, el poder Judicial y el Político en su conjunto”, manifestó Caminos.

Al igual que lo afirmó Lucrecia; “Detrás de la trata de personas hay gente poderosa y por eso nunca va a caer (…), El Gobierno tendría que brindarles apoyo y contención a las víctimas y no lo hace, no cuenta con infraestructura para hacerlo y tampoco le conviene, porque son ellos los que están detrás de las redes (…) Cuando muestran que cae una red, es todo pantalla, rescatan a un par de chicas, y a la semana ese prostíbulo sigue funcionando. Además no ayudan a las víctimas liberadas, entonces vuelven a caer o en la misma red u en otra.”

El tráfico de personas es un fenómeno global que crece rápidamente y que afecta a países y comunidades de todo el mundo. El mismo involucra el manejo de personas con fines comerciales y lucrativos. Los tratantes forman  parte de redes criminales organizadas, en la que realizan una actividad ilegal, la violación de género y de los Derechos Humanos.

Son varios los miembros que conforman las redes. Entre ellos se encuentra los encargados de identificarlas y reclutarlas, luego está el que gestiona y financia su traslado (al interior u exterior del país.), los dueños administradores regentes de los lugares donde las explotan o alquilan a terceros a cambio de una renta, entre otros.

Los criminales se aseguran mediante el uso de la fuerza, la amenaza, el engaño y la violencia que las víctimas no puedan escaparse de la esclavitud. Sometiendo a las mujeres en un  “primer periodo, el de ablandamiento, en el cual les retienen los documentos, les cambian la identidad, les cortan el pelo, las tiñen, les borran todo su pasado y las someten a continuas violaciones de todo tipo, a través de golpes y quemaduras provocan un destrozo total de la persona. En cuanto a lo psíquico, manifiestan sentimientos de paranoia, depresión, ansiedad angustia, y en lo físico; marcas, quemaduras, cicatrices, golpes internos y externos, debido a que las patean, las obligan abortar a golpes, le destrozan el aparato reproductor femenino y las fuerzan a no cuidarse, ante esto contraen enfermedades de transmisión sexual, de todo tipo,” aseguró el doctor Marco Antonio Gramegna, Jefe del Servicio de Lucha Contrala Tratadela OIM.

Por su parte la licenciada Ansalde, manifestó que otros problemas que contraen son de adicción. “Les exigen consumir a diario grandes dosis de drogas y alcohol, para que el cuerpo resista todo el día y poder atender entre 30 y 40 hombres por noche”. Y explicó; “hay redes de trata, porque hay consumidores, todos son cómplices, desde los medios con la publicación del rubro 59, la sociedad, que ve los papelitos pegados en los teléfonos públicos en los que se ofrecen mujeres y los hombres se sirven de ellos, como si la mujer fuera una cosa, un servicio para ser consumida por el varón. (…) Es por ello que cuando una red cae las mujeres vuelven a entrar al negocio de la trata, porque no hay asistencia y  tratamientos, entonces ellas dicen; -esta es mi vida, yo soy una cosa, solo sirvo para esto”- Las víctimas no logran reinsertarse, porque en la sociedad hay un desprecio constante.

La Oficinade Rescate y Acompañamiento a Personas Damnificadas por el Delito de trata, comunicó que trabajan a diario en el asunto, y desde el 2009 hasta el actual año hubo un incremento de liberación de mujeres, caídas de redes, allanamientos y  detenidos. A pesar de ello,la LicenciadaLucrecia, en disconformidad asegura, que “los datos oficiales que brinda el Estado están manipulados. Mientras menos se muestra, eso no existe, se dice que es mentira,  desalojan redes, y a la semana vuelven a funcionar. Es por ello que nunca hay datos precisos, ni sobre las redes, ni sobre las mujeres liberadas.”

La OIM afirma que a nivel mundial, se estima que más del 90% de las víctimas de trata, de explotación sexual, son mujeres, niñas y adolescentes con bajos niveles de escolarización, pertenecientes a grupos familiares numerosos o con necesidades básicas insatisfechas, donde la mayoría de sus integrantes se encuentran desocupados o realizan actividades primarias no calificadas por las que perciben ingresos extremadamente bajos. Existieron casos de secuestros de clase media-alta, pero por la movilización que ello podría ocasionar dentro del país son enviadas al exterior.

La trata de personas es un delito de difícil visibilización porque ocurre en circuitos clandestinos y hay muchos poderosos involucrados e intereses de por medio. A esto se suma que los familiares de las víctimas no denuncian por temor a las represalias. Es importante que la opinión pública esté informada y prevenida al respecto, así como es crucial el rol de los medios de comunicación en la concientización de este problema y sus consecuencias, para decir ¡Basta a las redes de trata!, los seres humanos no estamos en la categoría de objeto de intercambio económico.



El tráfico de personas es un fenómeno global que crece rápidamente

 Me ofrecieron empleo en un restaurante en la Capital, a casi 400 km de mi casa. Como en mi pueblo no había trabajo, acepté. Me adelantaron $200 y me dieron el pasaje en ómnibus. Cuando llegué a la dirección que me habían dado, me dijeron que el restaurante era a unas cuadras, y me llevaron en auto. Pero cuando llegamos, no era una parrilla: era una Whiskería. Me encerraron, me pegaron, me violaron y me obligaron a prostituirme. Además me dijeron que si le decía a alguien, esto mismo se lo harían a mis hijas, ya que sabían donde vivían. Nunca pensé que me pudiera pasar una cosa así.

El “coyote”, es aquellas personas encargadas de secuestrar mujeres, engañarlas y maltratarlas para luego trasladarlas a un sitio en donde ejercerán la prostitución, a través de la esclavitud.

El Ministerio de Justicia Seguridad y Derechos Humanos, define ala Tratade blanca, como “la captación, el transporte, traslado, acogida o recepción de personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra  con el fin de abusar de ella. La explotación incluye la prostitución ajena u otras formas de explotación sexual, trabajos o servicios forzados, la esclavitud o las prácticas análogas a la esclavitud, la servidumbre o la extracción de órganos.”

El 25 de diciembre de 2003 el Estado sancionó un protocolo, con el fin de aplicar una ley que frene la trata de personas, reduzca el poder y la influencia de los grupos delictivos organizados que abusan de los individuos.

El protocolo establecía pleno control de las fronteras y el poder Judicial por la que obliga a los Estados a penalizar a los proxenetas, apoyar la responsabilidad del Gobierno para las investigaciones, enjuiciar y condenar a los traficantes, aplicar sanciones para los condenados acordes al delito provocado, ampliar la protección a la víctima, garantizando seguridad, proporcionando información legal, recuperación física y psicológica, y garantizarles el retorno a su país de origen en caso que las mujeres procedan de otra nacionalidad.

Más tarde el 29 de abril de 2008 se aplicó la ley contra la trata, bajo la sanción 26.364. Si bien desde su puesta en vigencia hasta la actualidad han sido rescatadas 753 víctimas según documentos brindados por el Estado. La ley sostiene un máximo de cinco años para los condenados, sin distinción del grado de delito provocado, como también considera no trata de personas, los casos de mayores de 18 años en los que sostiene que hay un presunto consentimiento de la víctima.

Esos y varios puntos de la ley, difieren con los principios planteados por las Organizaciones, ONGs, Instituciones y Asociaciones que ayudan a víctimas de trata y violencia de género. Ante la disconformidad masificada, las agrupaciones decidieron unirse frente al Congreso los días 3 de cada mes con el objetivo de “(…) reclamar por la re-sanción de la ley, por las mujeres desaparecidas, denunciar la complicidad de la trata, y exigir al Estado que aparezcan las víctimas, como también demostrar la ineficiencia del aparato Judicial frente a estos hechos”, así lo precisó,la  Licenciada LucreciaAnsalde, deLa Casadel Encuentro.

Lucrecia sostiene que es el Estado el responsable principal de contribuir con el mejoramiento social, con la eliminación la delincuencia, la prostitución y el tráfico de drogas, entre otras.

Por su parte Viviana Caminos, coordinadora dela Red Nacional  Alto al Tráfico,La TratayLa Explotación SexualComercial de niños, niñas y adolescentes, (RATT) asegura que “las redes son una mafia y nunca van a caer porque hay de por medio intereses creados, cómplices funcionarios, políticos, policías, el poder Judicial y el Político en su conjunto”, manifestó Caminos.

Al igual que lo afirmó Lucrecia; “Detrás de la trata de personas hay gente poderosa y por eso nunca va a caer (…), El Gobierno tendría que brindarles apoyo y contención a las víctimas y no lo hace, no cuenta con infraestructura para hacerlo y tampoco le conviene, porque son ellos los que están detrás de las redes (…) Cuando muestran que cae una red, es todo pantalla, rescatan a un par de chicas, y a la semana ese prostíbulo sigue funcionando. Además no ayudan a las víctimas liberadas, entonces vuelven a caer o en la misma red u en otra.”

El tráfico de personas es un fenómeno global que crece rápidamente y que afecta a países y comunidades de todo el mundo. El mismo involucra el manejo de personas con fines comerciales y lucrativos. Los tratantes forman  parte de redes criminales organizadas, en la que realizan una actividad ilegal, la violación de género y de los Derechos Humanos.

Son varios los miembros que conforman las redes. Entre ellos se encuentra los encargados de identificarlas y reclutarlas, luego está el que gestiona y financia su traslado (al interior u exterior del país.), los dueños administradores regentes de los lugares donde las explotan o alquilan a terceros a cambio de una renta, entre otros.

Los criminales se aseguran mediante el uso de la fuerza, la amenaza, el engaño y la violencia que las víctimas no puedan escaparse de la esclavitud. Sometiendo a las mujeres en un  “primer periodo, el de ablandamiento, en el cual les retienen los documentos, les cambian la identidad, les cortan el pelo, las tiñen, les borran todo su pasado y las someten a continuas violaciones de todo tipo, a través de golpes y quemaduras provocan un destrozo total de la persona. En cuanto a lo psíquico, manifiestan sentimientos de paranoia, depresión, ansiedad angustia, y en lo físico; marcas, quemaduras, cicatrices, golpes internos y externos, debido a que las patean, las obligan abortar a golpes, le destrozan el aparato reproductor femenino y las fuerzan a no cuidarse, ante esto contraen enfermedades de transmisión sexual, de todo tipo,” aseguró el doctor Marco Antonio Gramegna, Jefe del Servicio de Lucha Contrala Tratadela OIM.

Por su parte la licenciada Ansalde, manifestó que otros problemas que contraen son de adicción. “Les exigen consumir a diario grandes dosis de drogas y alcohol, para que el cuerpo resista todo el día y poder atender entre 30 y 40 hombres por noche”. Y explicó; “hay redes de trata, porque hay consumidores, todos son cómplices, desde los medios con la publicación del rubro 59, la sociedad, que ve los papelitos pegados en los teléfonos públicos en los que se ofrecen mujeres y los hombres se sirven de ellos, como si la mujer fuera una cosa, un servicio para ser consumida por el varón. (…) Es por ello que cuando una red cae las mujeres vuelven a entrar al negocio de la trata, porque no hay asistencia y  tratamientos, entonces ellas dicen; -esta es mi vida, yo soy una cosa, solo sirvo para esto”- Las víctimas no logran reinsertarse, porque en la sociedad hay un desprecio constante.

La Oficinade Rescate y Acompañamiento a Personas Damnificadas por el Delito de trata, comunicó que trabajan a diario en el asunto, y desde el 2009 hasta el actual año hubo un incremento de liberación de mujeres, caídas de redes, allanamientos y  detenidos. A pesar de ello,la LicenciadaLucrecia, en disconformidad asegura, que “los datos oficiales que brinda el Estado están manipulados. Mientras menos se muestra, eso no existe, se dice que es mentira,  desalojan redes, y a la semana vuelven a funcionar. Es por ello que nunca hay datos precisos, ni sobre las redes, ni sobre las mujeres liberadas.”

La OIM afirma que a nivel mundial, se estima que más del 90% de las víctimas de trata, de explotación sexual, son mujeres, niñas y adolescentes con bajos niveles de escolarización, pertenecientes a grupos familiares numerosos o con necesidades básicas insatisfechas, donde la mayoría de sus integrantes se encuentran desocupados o realizan actividades primarias no calificadas por las que perciben ingresos extremadamente bajos. Existieron casos de secuestros de clase media-alta, pero por la movilización que ello podría ocasionar dentro del país son enviadas al exterior.

La trata de personas es un delito de difícil visibilización porque ocurre en circuitos clandestinos y hay muchos poderosos involucrados e intereses de por medio. A esto se suma que los familiares de las víctimas no denuncian por temor a las represalias. Es importante que la opinión pública esté informada y prevenida al respecto, así como es crucial el rol de los medios de comunicación en la concientización de este problema y sus consecuencias, para decir ¡Basta a las redes de trata!, los seres humanos no estamos en la categoría de objeto de intercambio económico.