Chantecler Tango
Dramaturgia: Mora Godoy | Dirección: Stephen Rayne
Por Dra. Raquel Tesone
El Chantecler, ubicado en pleno centro porteño, se inauguró en el año 1924. Durante veinte años, fue un lugar emblemático del tango abarcando su época de mayor auge en la que dejó de pertenecer al arrabal. Fue ganando esa legitimidad gracias a las orquestas, como la de Juan D’Arienzo, que actuaban todas las noches en el Chantecler; gracias a Carlos Gardel, quien era habitué del lugar; y gracias a los diferentes personajes que sostuvieron este mundo del tango: artistas, intelectuales y políticos.
Dichos personajes se lucen en esta obra con impresionantes interpretaciones que acompañan la danza. Con todo su glamour, Mora Godoy encarna a Rithana, la femme fatal compañera del dueño de esta milonga, y despliega todo su arte tanto en lo actoral con su fuerza escénica, como en el dominio del baile con su estilo propio. Los diferentes personajes que representan a los milongueros de aquellos tiempos son todos eximios bailarines de tango; aunque Mora Godoy se destaque como la gran diva del espectáculo, cada pareja de baile brilla a su manera y con su estilo. Estos personajes tangueros aportan también una nota de color a la música y a las letras de este género que hablan de una creación única, signada por la pasión, el amor, las traiciones y los desenlaces trágicos.
Así también, el vínculo con la corrupción policial que clausuraba este tipo de recintos para detentar su poder, no está tan lejos de nuestra realidad actual en la cual empezaron a proliferar los lugares under que se encuentran con serias dificultades para ser habilitados. ¿Será que el tango conserva sus raíces arrabaleras y tiene que quedarse en los márgenes de los tugurios clandestinos? Ese puede ser su origen, y ciertamente lo es. Sin embargo, el Chantecler fue la viva representación del logro de legitimización social, aunque luego haya cerrado sus puertas, como efecto de la represión y como resultado de múltiples cambios sociales. En la actualidad, el éxito que obtuvo esta obra de teatro en París nos demuestra que nuestro tango ha atravesado las fronteras y que tiene un lugar en el mundo entero.
Enrique Cadícamo, uno de nuestros grandes poetas del tango, le consagró un homenaje a este recinto milonguero al componer Adiós, Chantecler:
Te redujo a escombros la fría piqueta
y, al pasar de noche mirando tus ruinas,
este milonguero se siente poeta
y a un tango muy triste le pone sordina.
Entre aquellas rojas cortinas de pana,
de tus palcos altos que ahora no están,
se asomaba siempre madama Ricana
cubierta de alhajas, bebiendo champán.
Entre risas alegres y chistes,
siempre estaba apenada René,
y de verla tan linda y tan triste
fue por eso que me enamoré.
Hoy ni ella está más en la sala,
ni tampoco entro yo al cabaret,
se vinieron abajo tus galas
bullanguero y cordial Chantecler.
En las noches bravas que el tango era un rito,
vibraba la sala con ritmo nervioso,
porque en ese entonces estaba Juancito
tallando en su orquesta su estilo famoso.
Ya no queda nada y aquello no existe,
ni tus bailarines ni tu varieté.
Te veo muy triste pasar silencioso,
Príncipe Cubano, frente al Chantecler.
El resignificar en la actualidad al Chantecler como símbolo de la época de oro del tango es otro homenaje casi nostálgico, como lo es el tango mismo, y es, a la vez, una forma de señalarnos que aún hoy sigue siendo nuestro patrimonio cultural, y por eso lo tenemos que valorar y cuidar entre todos.
Ficha Técnica
Elenco: Mora Godoy, Horacio Godoy, Marcos Ayala, «Black» Rodríguez Méndez, Marcela Vespasiano, Ariel Pérez, Graciela Calo, Silvia Fuentes, Martín Almirón, Natalia Patyn, Giovanna Di Vincenzo, Iván Romero, Pablo Ruiz, Silvana Núñez, Juan Manuel Firmani, Micaela Spina, Chantal Fernández Crea, Gustavo Vargas, Jorge Tagliaferro, Arturo Gutiérrez, Yanina Muzyka, Emmanuel Casal, Magdalena Gutiérrez Calviño.
Dirección: Stephen Rayne.
Idea original: Mora Godoy.
Guión: Stephen Rayne, Mora Godoy.
Música original: Gerardo Gardelin.
Escenografía: Julieta Ascar.
Iluminación: Cristian Tateossian.
Vestuario: Cecilia Monti.
Dirección coreográfica: Mora Godoy.
Equipo coreográfico: Juan Manuel Firmani, Gustavo Wons, Graciela Calo, Horacio Godoy, Ignacio González Cano.
Dirección orquestal: Juan Miguens.
Orquesta: Juan Miguens (contrabajo), Lucas Furno (violín), Juan Pablo Gallardo (piano), Leonel Gasso (bandoneón).