Por Gimena Rubolino

«Es muy difícil ganarle a la inflación» afirma el especialista en Finanzas Mariano Otálora, autor del libro «Qué hacemos con los pesos». En esta nota,  nos da los tips principales para estirar el dinero cuando los billetes no alcanzan.

Actualmente tenemos una inflación de alrededor del 40% y generalmente el problema que se nos presenta es que pagamos precios nuevos en el supermercado con el salario más viejo. Los bienes de la economía aumentan constantemente y con ellos los temores tanto de los consumidores como de los propietarios de los comercios.

Para combatir esta vorágine una de las medidas que implementó el gobierno fue la incorporación de los «precios cuidados» en las góndolas de los supermercados pero muchas veces estos productos se encuentran en falta y no son repuestos en el corto plazo.

Una de las medidas principales que recomienda el especialista Mariano Otálora es comprar una mayor cantidad de productos que forman parte de nuestra alimentación cotidiana y que sabemos que los vamos a consumir, tal es el caso de las bebidas y alimentos no perecederos.

«Las bebidas están teniendo un incremento en los precios a la par de la inflación, así que una forma de hacer rendir el dinero es comprar una mayor cantidad de bebidas y de esa forma me aseguro pagarlas a un precio menor  que el mes próximo»  afirma Mariano.

«En el caso de las frutas y verduras también es importante tener en cuenta que siempre las que son de estación presentan un precio más bajo. Hacer un presupuesto y reconocer cuáles son estos alimentos para ver de qué forma podemos ahorrar unos pesos  es una medida fundamental para poner en práctica».

Con la llega de la inflación, uno de los interrogantes que se nos presenta es ¿Por qué hay tanta diferencia con los precios de los alimentos en los negocios de las distintas zonas?

Otálora sostiene que cada comercio tiene sus costos propios los cuáles varían dependiendo de distintos factores: si el local es alquilado o propio, variación del precio de alquiler de acuerdo a la zona, etc.

«El comercio realmente necesita ajustar su inflación porque al igual que los consumidores sabe que el proveedor le va a aumentar los productos el mes siguiente».

«El análisis no hay que hacerlo sólo con el puesto de ventas, sino con toda la cadena de valor, hay que entender que hay algo en la Economía que se llama costo de reposición, lo que yo vendo, me debería alcanzar para poder reponer estos productos entonces por eso, aumentan más porque no saben cuánto van a pagarlo el mes próximo» explica Otálora.

Por otro lado, el especialista reconoce que en nuestro país no hacemos valer tanto nuestro poder como consumidores. El mercado funciona por oferta y demanda y mientras haya consumidores que compren a precios altos, el negocio en cuestión no va a bajar los precios.

En el caso de los alimentos entran en juego otros factores porque no siempre tenemos el tiempo suficiente de ir al mercado más barato y terminamos comprando algunos productos en el negocio «más cercano» «el que está abierto» o «nos queda de paso».

Sin embargo, hay algunos valientes que sí se animan a quejarse: «Me cansé del chino siempre que voy me cobra todo con diez o seis pesos más. Una vez le dejé todo en la caja y me fui»  afirma José Rodríguez, de Recoleta.

Cuando hablamos de inflación todos los bienes y servicios de la Economía aumentan a la par, aumenta la escuela, la cochera, alquiler, etc. Es generalizado el tema. Por este motivo, resulta imposible que el sueldo rinda.

Algunos productos como la nafta han aumentado por encima de la inflación este año. Sin embargo, no hay que desesperarse siempre que llovió paró y según detalla Otálora de a poquito la inflación debería ir bajando.

Aunque el gobierno actual no reconozca que hay inflación y el Indec nos siga vendiendo cifras ilusorias la verdad la tenemos en el momento de la compra. Hacer rendir el dinero y buscar la manera de que la inflación nos afecte de la menor manera posible es fundamental para sobrevivir en este proceso que tarde o temprano llegará a su fin.

Para más información visitar la web www.salirdelcolchón.com.ar o seguir a Mariano Otálora vía twitter en @otaloram.

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