«Me siento argentino a fondo y me duele lo que ocurre»
Por Mariana Gioiosa
Reseña de la instalación Heridas de Gonzalo Veloso
En una sociedad que está cada vez más atravesada por posturas extremas y contrapuntos, afortunadamente existen artistas que van más allá de esta realidad y proponen una mirada distinta con el propósito de acercarnos unos a otros y dejar de lado las diferencias políticas, clasistas, religiosas e ideológicas.
Tal es el caso del artista visual y arquitecto Gonzalo Veloso, cuya instalación Heridas, en el Museo Benito Quinquela Martín (MBQM), impacta por su recorrido sonoro y visual e intenta achicar la «grieta» que aún perdura entre los argentinos.
Con la curaduría de Yamila Valeiras, la obra de Veloso surge de la coyuntura actual sin perder de vista el contexto histórico. Se trata de una instalación de 7,32 metros de largo por 2,44 metros de alto que arroja destellos de luz. Es una experiencia sensorial que invita a la reflexión con el fin de cicatrizar las «heridas»
Está realizada sobre un soporte de madera que cumple una doble función: permite armar las paredes, el techo de la experiencia artística por un lado y por otro representa una «buena madera de raíz».
A pocos metros de ingresar, sorprende un zumbido profundo que se asemeja al que Lars Von Trier utiliza en sus películas para crear un clima de suspenso, que se fusiona con el de latidos del corazón. Allí adentro hay oscuridad, el sonido se vuelve más intenso y un haz de luz facilita la lectura de varios grafitis: «Todos somos responsables de la sociedad que tenemos», «¿Realmente estás dispuesto a escuchar y tratar de entender?», «Siempre el otro tiene la culpa», son algunos de los mensajes.
«Me siento argentino a fondo y me duele lo que ocurre. Hay conveniencia y falta de tolerancia. Muchos creen que si no pienso igual soy su enemigo. Aceptar al que piensa distinto ayuda a evolucionar, las ideas nuevas permiten mejorar», resalta Veloso,
Una de las paredes laterales presenta 13 huecos circulares que, al asomarse, el visitante se encontrará con un espejo que devuelve el modo en que se reflejan las lesiones, y que además lo integra a la obra. También en esta grieta aparecen figuras polémicas que marcaron la historia argentina de los últimos años como: Diego Maradona, Mauricio Macri, Cristina Kichner, Alberto Fernández, Jorge Lanata, El Papa Francisco, Mirtha Legrand y Milagro Sala, entre otros.
Para hacer este trabajo utilizó la técnica mixta (collage) con esmalte, acrílico, látex, papel de diario, tela, soga y enduído plástico. Además de la espátula y los pinceles, también usó sus propias manos para darle una mayor expresión.
El papel de diario simboliza a la sociedad, está pintado de negro y blanco. Los tonos rojos encarnan las heridas mientras que las sogas intentan sanarlas.
«Mi intención no es transmitir “hay que hacer esto” sino simplemente contar “a mí me pasa esto” y luego invitar a reflexionar», explica.
Veloso es un reconocido artista visual y arquitecto, que también expuso sus pinturas en Art Basel de Miami (2006), Art Dublin (2009), Río de Janeiro, Brasil y Punta del Este, Uruguay, entre otros lugares.
El motivo por el cual se dedicó a las artes visuales fue porque en el dibujo encontró su refugio, ya que en el colegio le hacían Bullyng por «ser alto y de rulitos» y luego experimentó con el formato tridimensional «Iba al Belgrano Day School. Fui el primer alumno que acudió a la psicopedagoga. Tenía dislexia y me costaba leer. Fue entonces cuando empecé a dibujar hormigueros, eran mundos por debajo de la tierra donde todos éramos iguales».
Heridas es su primera instalación y la realiza en el Quinquela que se relaciona con el concepto que el artista aborda en este trabajo por ser un museo que se caracteriza por la diversidad y la inclusión, manteniendo la premisa del célebre pintor argentino. «Cuando empezamos a hablar con Víctor Fernández, director del MBQM, sobre la instalación nos emocionamos. Me dijo que Quinquela Martín era tan amigo de Juan Domingo Perón como de Torcuato de Alvear y si mi idea es unir es un buen mensaje para exponer. También es una idea esencial de Quinquela»
Además, al final del recorrido se encuentra un árbol, realizado con la misma técnica, donde el público podrá compartir su experiencia. El mensaje se coloca en un pequeño trozo de papel a modo de hoja.
«Me parece que es una obra positiva, incentiva a provocar un cambio en la sociedad desde el lugar que cada uno está, aportar ese granito de arena. Me gustaría que la muestra se vuelva itinerante y que pueda ser experimentada en otras provincias», dice entusiasmado.