En la mansedumbre del verano, resplandece un cuarteto de flamantes publicaciones de editoriales independientes. Los libros irradian destellos: ediciones bellísimas de textos imperdibles y con un diseño de tapa cautivador, que invitan a pasarse la tarde estival junto a ellas.

 

Si bien la temporada estival se percibió tardíamente en Argentina, las novedades editoriales han dado una resolana más que apacible desde los primeros meses del año. Entre esos nuevos rayos emergentes de luz literaria se pueden destacar cuatro obras tan variados en estilo y género, como los destinos vacacionales en los que nos pueden encontrar a cada una y cada uno de nosotros. Las luces elegidas son variadas: un florilegio de cuentos de atmósfera intimista, un debate sobre el uso del lenguaje inclusivo, un poemario casi panfletario para darle un tinte poético a la opresión laboral y la reunión de obras de teatro con núcleo temático en el barrio. Van aquí, entonces, cuatro fulgores para disfrutar del calor climático y del cobijo literario.

 

☀ El sol mueve la sombra de las cosas quietas, Alejandra Kamiya
Editorial BAJOLALUNA

El título de la antología es fiel reflejo de la atmósfera en las que se despliegan los cuentos. Todos los relatos presentan pequeños mundos familiares o individuales en los que los personajes se asoman a un jardín, a la vereda de una casa o la remembranza de las cosas quietas de su pasado. El primero de los cuentos, «Separados», es un manifiesto del estilo de Kamiya y un sol que empieza a mover la sombras de los otros relatos que siguen, aún quietos para el lector pero, a su vez, parte activa de un mecanismo literario que espera ser iluminado. El último cuento, «Veré árboles» es un ocaso, un cierre del ciclo y una comprobación de que los resplandores forman un sistema mayor: una poética en la que la focalización en lo pequeño brilla de manera única, como eslabón de un cosmos perfecto. Entre las últimas palabras del libro y, como osada despedida momentánea del lector, el ojo se topa con la oración «Mañana va a ser ayer todo el tiempo». Esta reflexión sobre la percepción del tiempo y, también del espacio, es la que recorre  El sol mueve la sombra de las cosas quietas: una luz que incita a mover y a cuestionar nuestras coordenadas estables.

 

☀ La lengua en Disputa, Beatriz Sarlo y Santiago Kalinowski
Ediciones Godot

La última edición de la Feria de Editores, que se celebró en agosto en el Centro Cultural Konex, reunió una cantidad inconmensurable de libros novedosos y ediciones preciadas para lectores amantes de rarezas. Además, posibilitó la generación de un texto que logró promover su edición posterior: la charla que Beatriz Sarlo y Santiago Kalinowski tuvieron en relación con el uso del lenguaje inclusivo. Ediciones Godot supo capitalizar este debate imperdible y plasmarlo en un objeto-libro de bellísimo diseño, como suele hacer en sus publicaciones. El resultado es no sólo una charla que muta en debate sobre una temática que atraviesa las prácticas discursivas cotidianas de cada hablante sino también un ejercicio impecable de los recursos retóricos de Sarlo y de la precisión teórica de Kalinowski. Sus voces fluyen en el intercambio del diálogo como una brisa resplandeciente que va para la misma orilla y, poco a poco, con precisión discursiva y sagacidad, la temperatura de la disidencia desembarca en dos posturas opuestas, sólidas. Allí, en los puertos de Sarlo o de Kalinowski, cada quien podría quedarse al menos un rato, durante el verano y pensar, una vez más, el estatuto y la pertinencia del uso de las variantes inclusivas en el lenguaje.

 

☀ Poemas para no ir a trabajar, Fernando Aíta
Editorial La Libre

Poemas para no ir a trabajar es, en apariencia, lo que se espera de un libro que puede ser leído en el colectivo, tren o subte para ir a trabajar: formato de bolsillo, tapa rústica, hojas resistentes y letra grande. Esta ironía, que se plantea ya desde el formato, recorre con hilaridad las composiciones. El epígrafe, de hecho, es el primer asomo de un Febo socarrón: «Es el principal propósito de este panfleto que las personas trabajadoras se inspiren y no vayan a trabajar». Como se puede observar, la obra también tensiona el trabajo con los géneros: se autodefine como panfleto, se deja ver como una antología de poemas y en sus textos se pueden rastrear géneros  participantes tan variados como las excusas y razones presentadas para no ir a trabajar. Los mails a jefes, los diagnósticos médicos o los pronósticos de desastre climático son ficcionalizados con gran talento por Aíta. Poemas para no ir a trabajar rescata todo lo poético que tienen nuestras disquisiciones internas o desparpajo externo a esa hora en la que nos levantamos y no podemos -o no queremos- ir a trabajar. Recorrer estos textos en ese tiempo que nos han otorgado por haber ido al trabajo todo el año puede ser regocijante y, tal vez, también persuasivo. La genialidad de la obra en la letra se complementa con un plus: un código QR en la hoja final, desde el que se puede escuchar una playlist de «Música para no ir a trabajar», seleccionada especialmente por Aíta con gran tino, para quienes trabajan, para quienes no quieren hacerlo y para quienes desean un rato más al sol.

 

☀ Rectángulo de San Andrés, Mauricio Kartún
Editorial Interzona

La producción de Mauricio Kartún es  una obra que brilla por sí misma, especialmente en su puesta en escena. De todos modos, Interzona brinda  la posibilidad de hacer foco en su dramaturgia y en un grupo de textos teatrales que forman un mapa literario con base en el conurbano bonaerense. En la reunión de estas piezas, que invita al recorrido apacible por las calles y espacios barriales, destaca la ya clásica «Chau, Misterix», con el agregado de monólogos de los personajes. El mapa cuenta con las palabras iniciales del propio Kartún y con un estudio preliminar de Dubatti, quienes ofician de guía por el territorio teatral. El estilo tan característico de la dramaturgia de Kartún queda plasmado en esta selección de obras: el detalle en las didascalias, la configuración de personajes entrañables a partir de la niñez evocada y el funcionamiento a la perfección de la imagen generadora, como germen de la escritura y de la creación de mundos. Cada una de las piezas encajan a la perfección en ese barrio de San Andrés: son casas con una luz diferente pero todas ellas iluminan un recorte dramáticamente perfecto, que invita a su recorrido lector y al deseo de verlas representadas.

Cuatro luces, cuatro puntos cardinales hacia los que mirar este verano. Y leer, porque hay mucha novedad bajo el sol.

 

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