Entrevista a Patrick Foret

Patrick Foret es el Director de Negocios de Art Basel, hace 10 años que forma parte de la organización y entre otras tareas fue el responsable de lanzar Art Basel Cities en Buenos Aires, una alianza que aún no finalizó.

 

Es de nacionalidad francesa, pero cuando tenía 22 años dejó su país natal para radicarse en siete u ocho países diferentes. Esto es posible porque respeta la diversidad cultural y las distintas expresiones artísticas. Cree que desde el arte se puede construir un mundo mejor.

– Qué opinás sobre la producción artística argentina?

Hay algo distintivo y único en la historia de Argentina, en sus características como país y en el carácter de su gente. Cierto «dramatismo local» y «romanticismo» que también se plasma en el arte. Eso es muy atractivo para un extranjero.

– ¿Estas particularidades atraen a los coleccionistas?

Desde una perspectiva internacional, tienen alta calidad a precios bajos, lo cual es muy convenientes para los coleccionistas. Por lo tanto, hay lugar para crecer en el futuro y los artistas merecen tener una plataforma desde donde ser reconocidos y apreciados.

– ¿Cómo definís Art Basel?

Muchos periodistas en los últimos años me preguntaron: «¿Qué es esto? ¿Se trata de una Bienal? ¿De una exposición? ¿Es una muestra de arte?» Mi respuesta es que es todo eso y a la vez no lo es. Nosotros somos respetuosos del lugar donde estamos. Por ejemplo Buenos Aires. Venimos acá a escuchar sus necesidades. Se trata sobre esta ciudad y no Art Basel. Nosotros somos solo un medio para promover, celebrar y crear oportunidades para los artistas y los coleccionistas.

Nos juntamos para ver qué podíamos hacer y definirlo juntos. Uno de nuestros mayores desafíos fue lograr que las treinta organizaciones e instituciones relacionadas con el arte que hay aquí trabajen todas juntas. El resultado fue muy bueno. Tenemos más poder trabajando juntos y una voz más fuerte.

 

 

-¿Cómo fue la experiencia Art Basel Cities en Buenos Aires y cómo continúa?

Tengo entendido que la Ciudad de Buenos Aires va a participar en Art Basel Miami con un programa que consiste en un parque de esculturas de artistas argentinos.

Seleccionamos Buenos Aires para comenzar con el programa Art Basel Cities porque ustedes tienen una gran riqueza que necesita ser compartida.

A partir de esta alianza que hicimos con el Gobierno de la ciudad, nos procuramos difundir el patrimonio artístico y cultural argentino desde la ciudad hacia el exterior y desde el exterior hacia la ciudad.

Este vínculo comenzó con fortaleza el año pasado a través de Rayuela: activaciones que se hicieron en distintos puntos de la ciudad por artistas nacionales e internacionales, curada por Cecilia Alemani. Para esa oportunidad, a través del trabajo conjunto con el gobierno y las instituciones logramos despertar mucho interés. Las acciones fueron visitadas por más de 30.000 personas y creció la visibilidad de la actividad artística. El nuevo capítulo consiste en acompañar a Buenos Aires  al extranjero

– Teniendo en cuenta que Art Basel fue la primera feria que se creó en el mundo en 1970, sin dudas marca tendencias ¿Hacia dónde está yendo ahora?

No solamente ha cambiado Art Basel, el mundo lo ha hecho. Por ejemplo cuando me sume a la institución hace 10 años, éramos 23 personas, y hoy somos más de 100. Se ampliaron las estructuras, se hacen dos ferias más y ahora tenemos alianzas con otras ciudades.

Ya no se trata de edificios, pasamos de construir estructuras a construir experiencias y relaciones. En una charla con un artista norteamericano sobre cómo veía el arte en el futuro me dijo: «Te despertás a la mañana, abrís la puerta, salís, y el arte está en todas partes», hacia eso vamos, crear experiencias emocionalmente e intelectualmente enriquecedoras. En la actualidad contamos con nuevas tecnologías y toda clase de adelantos. Hay laboratorios en Japón que se dedican a desarrollar tecnología para afectar los sentidos con colores, sonidos y olores, para mencionar un ejemplo. De modo que el futuro del arte está en la experiencia interactiva, y es allí donde las obras de arte y los artistas encuentran su expresión personal. Como feria de arte, buscamos trascender el espacio artístico.

– ¿Qué opinás sobre el poder del poder político y Mass media relacionado con el arte?

Creo que el arte y los artistas tienen un sorprendente poder si son bien tratados, y cuentan con suficiente amparo para poder expresarse. Estamos en contra de expresiones de arte anuladas o exposiciones que se cierran.

– ¿Qué pensás sobre otras ferias de arte como Frieze y The Armony Show?

Hay un increíble apetito de ver arte contemporáneo, que refleje como es nuestra vida actual, con temas políticos, sociales y estilos de vida.

Además, las ferias son una plataforma increíble para conocer gente e intercambiar ideas. Encontrás coleccionistas, artistas y gente apasionante. Cada uno halla en estos espacios lo que le interesa.

– ¿Puede el arte contribuir para que vivamos en un mundo mejor?

Viví en Australia durante 14 años y conocí a una comunidad de habitantes originarios.  Uno de ellos me dijo: «Nosotros tomamos prestado la tierra de nuestros hijos, por lo tanto, cuando se la devolvamos lo tenemos que hacer en mejor estado.» No es lo que estamos haciendo hoy.

Hay dos tipos de artistas que tienen voces muy fuertes hoy: los innovadores y los comprometidos políticamente. Ellos tienen la posibilidad de transcender fronteras. El arte es un medio, un lenguaje que todos pueden comprender.

– ¿Tienen responsabilidad sobre esto los artistas y la gente que trabaja en arte?

Definitivamente, los artistas que pueden aunar voluntades son más responsables que otros.
En el mundo actual, hay países en guerra, pero también ciudades interconectándose y personas como yo, que se interesan en transmitir este concepto.

 

 

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