La tecnología y su vínculo con la estética nos introducen en un replanteo del concepto de arte

Por: Margarita Gómez Carrasco

Al contemplar la obra de Eduardo Pla surge de mis pensamientos, por asociación, una frase de Larry Shiner: «Nuestra moderna categoría de arte no tiene equivalente en el mundo antiguo». ¿De que categoría se trata? ¿De un concepto que se introduce en el plano de lo significativo? ¿Las bellas artes son una invención moderna?

Fue una sorpresa conocer a Pla durante su retrospectiva 40 años de Arte en el Centro Cultural Recoleta. A los breves minutos de nuestra charla, hicimos intercambio de tarjetas personales. Cuando extendió su mano para entregarme la suya, quedé atónita. Su tarjeta tenía un agujero, una circunferencia en medio del blanco; al lado aparecía su nombre como surgido de la nada —sin embargo, el color blanco paradojalmente es también la conjunción de todos los colores—.

En su búsqueda de la perfección y de lo completo, este artista se sintió convocado a la creación de esferas, aunque ese afán muy pronto se diluyó cuando él —sin saberlo— se presento incompleto a través de una tarjeta agujereada. En ese momento me di cuenta de que era otro el sujeto que hablaba, ¡misterios de la vida!

En el transcurso de algunas semanas, nos encontramos nuevamente para esta entrevista. En esa ocasión conocí su taller, un fascinante trozo de mundo donde Pla despliega sus alas y madura ideas que luego convertirá en obras de arte.

 

¿Cuál es el motivo de tan prolífica producción de esferas?

Matemáticamente, todavía no se sabe cómo está hecha la esfera. Estudiando, me enteré de que las esferas también tienen que ver con Buda. Yo empecé a trabajar con la esfera en un estudio de Milán, por encargo, no es que estaba entusiasmado con la esfera. Luego Jorge Glusberg —en ese momento Director del Museo de Bellas Artes— me pidió que hiciera algo para poner en la primera Bienal Internacional de Arte en Buenos Aires: me acordé de las esferas, hice las esferas gigantes pintadas a mano. Ahí me di cuenta de lo que era la esfera.

 

¿Por qué te atrae esa forma?

Porque me cansé del plano. Cuando estudiaba arquitectura empezó a gustarme lo tridimensional; ahora me encanta hasta la cuarta dimensión. Esta cuestión técnica de hacer algo sobre la superficie plana me aburre. Se parece a cuando miras desde un avión y ves todo cuadrado, las casas son todas cuadradas; eso me hizo pensar que nos estábamos volviendo cuadrados. La forma de la esfera es más sensual, tiene más que ver con el Oriente. Es un cuerpo que se mueve, que tiene inercia. En cualquier lugar del mundo, las personas, sean chicas o grandes, se vuelven locas con este objeto que tiene un poco de vida propia y lo podes manejar. Sino, ¿por qué tanta gente juega al fútbol? El mundo, ¿cómo es? Redondo. Una mujer que está por tener un hijo tiene el vientre redondo. Es un desafío trabajar con la esfera, porque no solo es tridimensional; una esfera cambia totalmente, por eso también me gusta la idea de la luna, que te deja ver la otra cara.

 

También la esfera representa el andrógino, un ser mítico completo, que giraba (silencio). ¿Por qué se te ocurrió hacer la luna?

Por varias cosas. Primero porque es mi planeta, rige al signo de Cáncer. Después, porque es un misterio. Después, porque es romántica. Y después, porque nunca vimos el otro lado de la luna. El hecho de hacer una esfera iluminada, como si fuera la luna, tenerla al lado tuyo y poder tocarla, me encantó.

¿Por qué en tu instalación de la luna hay un espejo cóncavo que la envuelve?

Porque entrás en una especie de cuarta dimensión donde te podes ver reflejado o perder el sentido de la pared, ya que el espejo tiene forma curva, entonces te transformás un poco en la luna, que es redonda. También lo acompañé de una música muy especial, se llama Coros angelicales, es una mezcla de música de Oriente y Occidente que te transporta, porque la luna es universal, no es que la tenemos acá y otros no la tienen. De esa manera, saqué a la gente un poco de su mundo y funcionó, fueron 50.000 personas a ver la muestra, gente de todas partes, gente simple. Nunca me pasó algo así. Una vez se acercó una señora, me dijo «Maestro», me agarró la mano y me dio un beso; yo me vuelvo loco con esas cosas, con la relación con la gente.

¿A qué edad se despierta tu vocación por el arte?

Una vez estaba con mi familia en Tandil de vacaciones y viene una señora con su hijo. Eran titiriteros, y a mí me fascinaban los títeres, hasta tal punto que me puse a trabajar con ellos. Yo tenía diez años, más o menos.

 

¿Qué te gusta más, diseñar o manejar títeres?

Las dos cosas. Es lindo también eso de ser espectador y protagonista, aunque me gusta más ser protagonista. Después seguí con el Super 8, es lo que antes existía como filmadora. La muestra empieza así, con el Super 8 en el 68. Después voy al video, después hice un largometraje, después volví a Italia y trabajé en televisión, después hice teatro, o sea, tengo una formación artística, no tengo la formación de un pintor. Tengo la formación de un artista que en las distintas épocas fue utilizando los medios que estaban en ese momento. Por eso hay gente que se pregunta: ¿este qué hace? Hago de todo. Tengo una estética y una forma de ver las cosas que es la misma aunque pasen los años. Mi esencia no cambió, por ahí cambiaron los instrumentos. En el 2000 acá estaban los jubileos de Jesucristo, 2000 años de historia, ¿cómo plasmar en una imagen tantos años de historia? Hice un retrato junto al Palais de Glace, y los chicos decían: «Por fin algo distinto, algo bueno». Después no lo eligieron ni para mostrarlo. A los diez días, esta obra va a una feria de arte en Zurich y la compran el primer día. Yo estaba deprimido porque a veces dependo de lo que dice la gente; pensé que me había equivocado en todo, y al final no fue así. Me dije que iba a seguir con los retratos, porque es lo que a la gente le gusta, porque en una imagen mostrás la vida de una persona.

Pionero del arte digital en Argentina

Cuando a vos te dijeron «esto no es ni fotografía ni pintura», ¿eras consciente de que estabas inaugurando el arte digital? ¿Te consideras pionero?

Sí, totalmente. Siempre me gustó la tecnología, siempre. Puede ser por mi familia, porque mi padre tenía una fábrica de televisores, radios y tocadiscos; yo era chiquito, veía todas esas cosas y jugaba con eso.

 

Rompiste con todos los esquemas convencionales y tradicionales ofreciendo este arte a través de la tecnología…

Yo experimento con todo desde los años 60.

 

Una parte de tu obra me hace acordar mucho a Polesello.

A mí me hace acordar a Le Parc. Con Polesello me pasa una cosa rara, porque los dos hacemos cosas parecidas, pero sin querer. Yo no conocía a Polesello. Cuando vuelvo a la Argentina en el 96 a vivir, enseguida me hice amigo de él. Yo estaba acostumbrado a la elegancia de los artistas de Milán y le dije: «Me gusta porque sos elegante». Cuando vi su obra, me encantó. Hacemos cosas parecidas, yo principalmente por la influencia de Europa, porque yo me formé en Europa. Un día fui a comprarme un catálogo para ver lo que él hacía, para ver su trayectoria, y de repente pensé que nos parecíamos mucho. Los dos trabajamos con la geometría y los colores, pero él tiene una estética muy interesante. Para mí es muy importante la estética. Hay mucha gente que dice que es frívolo, pero es todo lo contrario, yo estudié el color y la forma en distintas partes del mundo, y no es frívolo, es una persona que sabe lo que está haciendo. Por ejemplo, el color es una vibración, esa vibración hace que te sientas de una forma o de otra y yo no quiero torturar ala gente. Unapersona que se compra un cuadro para poner en el living, si tiene una vibración mala, se va a sentir mal, y yo no quiero que la gente se sienta mal, yo quiero que la gente se sienta bien, porque ya bastante mal estamos, entonces si vos a un «cliente» le vendés algo que lo va a torturar y que no va a ser positivo, para mí, es un egoísmo total. Hay muchas maneras en el arte de decirle cosas a la gente, pero en la pintura no, para mí no es así. No digo que la pintura tenga que ser un elemento decorativo; sí tiene que ser profunda y transmitir sentimientos profundos, pero no negativos. Creo que el artista no tiene que ser egoísta, porque todos tenemos nuestros dramas, pero volcarlos en una obra con la que otra persona va a convivir todo el día es de un egoísmo total. A mí me pueden decir que soy un superficial, un snob.

 

La computadora, una cajita mágica

 

¿Por qué pensás que dijeron que sos superficial, snob?

Primero, por envidia, porque yo hago lo que quiero. Por ejemplo, para un Congreso de Oftalmología, me dijeron: «Hacé algo chico para un Congreso Internacional», o me desafiaron a hacer esferas con cajas. En otra ocasión, la firma italiana Alessi, que fabrica cosas para la casa en acero y plástico, me encomendó decorar un florero hecho por Mendini, al que si le sacás la tapa parece un florero y si se la ponés se vuelve una obra de arte. Lo interesante es que ellos se dieron cuenta que yo podía hacer los floreros antes de producirlos. Yo hice los floreros antes de que fueran a producción, porque yo trabajo tridimensionalmente, entonces cuando ellos vieron eso pensaron en hacer 100 diseños fotográficos y hacer una prueba con el público, a ver si le gustaba a la gente. Después me hicieron hacer un video y un mural con 10.000 diseños, todo hecho a computadora y en 3D.

 

Después del primer encuentro, donde hablamos acerca de lo que es arte, me quedé pensando sobre el tema, entonces releí un libro Larry Shiner, quien explica que al comienzo de la historia, existían otras categorías para definirlo y no había separación entre artista y artesano…

Bueno, ¿qué diferencia hay entre un artista y un artesano? El artesano es el que realiza la obra y el artista es el que la crea.

 

En la antigüedad, dentro del concepto de arte, se encontraban el arte de hacer zapatos, el arte de curar…

Es todo arte, porque el arte es pasión. Tenés que tener pasión por lo que hacés.

Hay personas que critican por criticar, no tienen demasiado conocimiento y dicen: «este artista es muy comercial», pero antes también se producía arte por dinero. Te cito uno entre tantos, Leonardo. Él producía por encargo, como muchos otros, el mecenazgo desaparece en el siglo XVII puntualmente en Holanda y se produce el surgimiento del mercado de arte. La crítica no puede ignorar este dato.

Es así. Es más, yo me siento muy identificado con Leonardo, aunque no tengo la pretensión de decir que soy un Leonardo del siglo XXI, la diferencia es yo no tengo el conflicto entre el arte y la ciencia de la tecnología, porque van de la mano, y a él le pasaba lo mismo. Era una persona que podía hacer un cuadro y también podía hacer un helicóptero y no lo criticaban, todo lo contrario.

Exacto, porque además él inventó un montón de cosas que no son muy conocidas…

Yo conozco porque en Milán hay un museo de él y yo tuve que hacer toda la parte técnica, con televisores, con textos, con tecnologías interactivas.

Leonardo era un estudioso. Por ejemplo, de la forma en la que describió el cuerpo humano. Menos mal que se lo permitieron, porque la Iglesia en ese momento metía en la hoguera a cualquiera. Yo no tengo ese conflicto. La computadora es un instrumento, lo que pasa es que la gente antes veía a la computadora como una especie de cosa rara que podía competir con la técnica del artista y no, es un instrumento como cualquier otro. Es una cajita mágica, porque desde el punto de vista de la estética tenés 256.000 colores en contemporáneo y combinándolos tenés 60 millones. Después tenés la tridimensión. Yo aprendí mucho de iluminación a partir de la tridimensión, porque es importante saber iluminar un objeto, este cambia radicalmente conla luz. Para poder manejar este aspecto estudié cromatología, pero lo que aprendí iluminando objetos con la computadora desde el punto de vista del color, no me lo enseñaron.

Tal vez parezca una pregunta obvia, pero no lo es, ¿qué nos podés contar acerca del mensaje de tus obras?

Primero, que es imposible no dar un mensaje. ¿Cómo hacés para no dar un mensaje? Si vos hacés una obra y la mostrás estás diciendo algo. La esfera es una reacción en contra del cuadrado; la forma curva es más sensual, tiene que ver más con el Oriente que con el Occidente y tiene que ver más con la mujer que con el hombre. Por ejemplo, ¿por qué Venecia es tan bella? Porque vos ahí encontrás una armonía entre Oriente y Occidente. El arte oriental es geométrico. Italia tiene un poco de cada cosa, porque fue una península invadida, entonces encontrás cosas maravillosas cada 20 kilómetros. En este momento, la verdad es que, desde el punto de vista artístico, Italia está en plena decadencia. Me gusta Italia por la moda, por el diseño, pero en el arte está un poco decadente.

 

Me quedé pensando en esto de los 60 monitores que pusiste en tu muestra. La primera lectura que uno hace es «vivimos en una era invadida por imagen».

A vos te pasó eso, otra gente entró y dijo: «¿dónde están los cuadros?». ¿Cómo hago para poner 650 obras en las paredes? Muchas son grandes, y hay muchas que ya no las tengo. En cada monitor había tres videos, después había un cuarto donde se pasaban proyecciones de cómo fueron hechas las obras; del otro lado había una sala oscura con unas esculturas luminosas que interactuaban con uno. Eso fue una cosa mágica, hasta la fecha no sé cómo hice eso.

 

Bueno, Lacan dice: «Soy donde no pienso». Tira por la borda la lógica cartesiana y nos invita a conocer al sujeto del inconsciente.

Qué interesante. Si buscás en Internet vas a encontrar muchas cosas al respecto, y también sobre el significado de la esfera y su conexión con el budismo. Es un objeto que ha sido usado desde hace siglos, pero a través de las elites de las religiones; no sólo las religiones, sino también las logias, los masones, por ejemplo. Hace poco un amigo mío va a ver la muestra y me dice: «La esfera es Buda y vos sos Buda». Yo dije: «Este está loco». Al otro día me trae un Buda con una esfera en la mano y sentí que ahí estaba pasando algo, empecé a buscar sobre la esfera y Buda: había conexiones directas, cosas que habría que estar meses para estudiarlas.

 

Bueno, la esfera representa un cuerpo perfecto, completo, y los seres humanos estamos faltados estructuralmente. ¿Cuáles son tus proyectos para 2012?

El 3 de enero tengo una muestra sobre el ojo, que es redondo. Por ejemplo, una vez hice muestras sobre flores; el ojo humano tiene un límite y gracias a la técnica podemos superar ese límite, entonces con una cámara macro me metí adentro de una flor y descubrí un universo. Ahora lo descubrí en el ojo, porque todos los ojos son distintos, son únicos, de hecho los querían utilizar para reemplazar la huella dactilar.

 

Qué interesante que elijas ojos, porque a través de ellos miramos, nos miran. Según el psicoanálisis, por allí circula la pulsión escópica.

Sí, hay una cosa muy interesante que un día aprendí para entrar en la cuarta dimensión: vos vas al baño, apagás la luz y aparece toda tu personalidad, pasado, presente y futuro. Hay gente que se asusta y sale corriendo. En ese momento podes ver tus demonios, tus ángeles, tu parte negativa y positiva. Pero, ¿sabés para qué es interesante? Para decirle a todos tus personajes que querés tal cosa, y así se elimina el conflicto entre ellos. No es para cualquiera. Hace poco le dije a un amigo que si quería experimentar la cuarta dimensión lo hiciera: entró al baño, lo hizo, pegó un grito y salió corriendo.

El hecho de mirarte y verte es muy interesante. Hice una obra a partir de eso, se llama Historia de un mal entendido, porque uno juzga a la gente y dice: «este es así». Seguro es así, pero también debe ser de muchas otras maneras. La gente juzga por la primera impresión y eso es muy banal, muy superficial. Por eso, te digo que las cosas que yo hago tienen un mensaje y un sentido que lo puede ver cierta gente.

Muchas gracias por tu tiempo. 

En el taller de Eduardo Pla pude apreciar como lleva a cabo sus ideas. Me mostró la construcción de la banda de Moebius en forma de una fuente luminosa de agua, inaugurada en 2008, que fue Primer Premio Nacional de escultura. También hablamos sobre la influencia y admiración por la obra de M. C. Escher y el homenaje que le hizo en Venecia, miramos los videos de cómo gestó y llevó a cabo su retrospectiva que reunió 40 años de trabajo y que tan gentilmente nos cedió para subirlos a nuestro medio.

Me retiré pensando en la Historia del mal entendido, nombre que me remite a conceptos psicoanalíticos en relación a la palabra. Una vez más, medité sobre el concepto multívoco de «Arte», tratando de echar un manto de luz al tema para entender la producción artística del polifacético estilo de Pla.

A mis pasos, la brisa del verano me envolvía. Caía la tarde, se escuchaba una música lejana de la cual parecía asomar el eco de la risa de Marcel Duchamp, burlonamente, atacando la idea de arte con su dialéctica anti-arte diciendo: «Solo en el arte es el hombre capaz de trascender el estado animal, porque el arte es una puerta hacia regiones que no se rigen por el tiempo y el espacio».

[showtime]

Referencias:

SHINER, Larry: La Invención del Arte. Una Historia Cultural. Barcelona-Buenos Aires: Paidós, 2004.

By Margarita Gómez Carrasco

The links between technology and art lead us to a reformulation of the concept of art.

When looking at Eduardo Pla’s work I think of what Larry Shiner once said: “Our modern category of art has no equivalent in the ancient world”. What category are we talking about? Is it a concept that belongs within the realm of significance? Are Fine Arts a modern invention?

It was a surprise to get to meet Pla during his retrospective “40 years in Art” (40 años de Arte) at the Centro Cultural Recoleta. After a brief conversation, we exchanged personal cards. When he extended his hand to give me his, I was stunned. His card had a hole, a circumference in the middle of the white paper: next to it, his name emerged – nonetheless, the color white is paradoxically also the conjunction of all the other colors –

In his quest for perfection and completeness, this artist felt compelled to create spheres, though this wish was soon diluted when he – without knowing – showed himself as an incomplete being, through a card with a hole in it. That was the moment I realized that the person that was talking was another one. Mysteries of life!

A few weeks after, we met again for this interview. In that occasion I got to visit his workshop, a fascinating place where Pla spreads his wings and develops ideas that he will then transform into artworks.

What is your reason for producing such a lot of spheres?

Matemathically, it is still unknown how a sphere is made. By studying, I learnt that spheres also have to do with Buddha. I started to work with spheres at a Milan studio, because of an assignment, it didn’t came out of my own interest. After that, Jorge Glusberg – at the time the director of the National Museum of Fine Arts – asked me to make an artwork to be placed at the first International Art Biennial of Buenos Aires, and then I recalled the spheres. I hand-painted giant spheres. And then I realized what the sphere was.

 

Why are you attracted to this shape?

Because I got tired of the flat surface. When I studied Architecture I started to like tridimension, and now I even love the fourth dimension. That technical matter of doing something in a flat surface makes me bored. It  makes me think of when you look down from an airplane and you see everything as squares: houses are all square, that made me think that we were turning into squares. The shape of spheres is more sensual and has to do with the Orient. It is a moving body, it is affected by inertia. Anywhere in the world, people  from all ages go crazy for this object that has a bit of a life of its own, and that is at the same time something you can physically handle. Otherwise, what would be the explanation for so many people playing football? The world, how is it? Round. A women that’s about to give birth has a round belly. It is a challenge to work with spheres, because it is not only tridimensional but everchanging. That’s why I like to think of the Moon too: it lets you see its other face.

 

Does it also represent the androgynous, a mythical being that was complete and rolled? (silence) Why is it that you thought of representing the Moon?

For various reasons. First because it is my planet, it is the ruler of the sign of Cancer. Then, because it is a mystery. Also because it is romantic. And because we never saw the other side of the Moon. I loved the idea of making an illuminated sphere, as if it was the Moon, and having it close to you and being able to touch it.

Why do you have a concave mirror enveloping the moon in your installation?

Because you’re entering a sort of  fourth dimension where you can see yourself reflected or lose the sense of the wall, since the mirror has a curved shape and you turn into the Moon yourself, because the Moon’s round too. I also accompanied it with a very special music called Angelical Choirs, it is a mix of Eastern and Western music that transports you, because the Moon’s universal, something that can be seen from all around the world. This way, I removed the people from their own worlds for a moment and it worked. 50.000 people went to see the show, people from different places, simple people. It was something that had never happened to me before. Once a lady came and called me “Maestro” (Master) and kissed me. I love those things, being close to the public.

At what age did your vocation for art begin?

Once I was with my family in Tandil for a vacation and a lady with her son came around. They were puppeteers, and I was fascinated by puppets, to the point that I started working with them. I was more or less ten years old.

 

What do you like the most, to design or to handle puppets?

Both things. I like to be an spectator and as well a protagonist, but I like being the protagonist better. After that I started working with Super 8, that was a filming machine at that time. The exhibition starts with that, the Super8 in’68. After that, I worked with video, then made a full-length film, then I went back to Italy and worked in television. Then I did theather, I mean, I have an artistic background, I don’t have the background of a painter. I have the background of an artist that used, throughout the years,  the media that was available at the time. That’s why people that ask themselves: “What is this guy doing?” I do all sorts of things, I have an aesthetics and a way of seeing things that remains the same  through time. Mi essence didn’t change, maybe my feelings did. In the year 2000 the “Jesus Christ jubilees, 2000 years of History” were here. How can you put in one image so many years of history? I did a portrait next to the Palais de Glace, and the boys said “finally something different, something good”. After that, they didn’t even choose it for an exhibition. Ten days after, this work was sent to an art fair in Zurich and bought in the first day. I was depressed because sometimes I depend on what people say,  and I thought I was wrong all along, but then it wasn’t that way. I said to myself that I would go on making portraits, because that’s what people like the most, because you can show a person’s life in one image.

Pioneer of digital arts in Argentina

When you were told “this is not photography, neither painting” were you aware of being founding digital art? Do you see yourself as a pioneer?

Yes, absolutely. I was always into technology, always. Maybe it is because of my family, because my father had a television, radio and record-player manufacturing company. I was a child, I saw all those things and played with them.

 

You broke all the conventional schemes by offering this art through technology…

I have been experimenting with everything since the ’60s.

 

A part of your work reminds me of Polesello.

It reminds me of Le Parc. I have a strange thing for Polesello, because we make things that are similar, but unintentionally. I didn’t know Polesello. When I relocated to Argentina in the year ’96, I made friends with him immediately. I was used to the Milanese artists’ elegance and I told him: “I like you because you’re elegant”. When I saw his work, I loved it. We do similar stuff, I have an European influence, I was educated in Europe. One day I bought a catalogue to see what he was doing, and then I thought we were very similar. We both work with geometry and color, but he has a very interesting aesthetic. For me, aesthetic is what matters. There are a lot of people that say he’s frivolous, but he is nothing but. I studied the color and the shape in different parts of the world, and he’s not frivolous, he’s a person that knows what he’s doing. For example, color is a vibration, and that vibration makes you feel one way or another and I don’t want to torture people. A person that buys a picture to put in their living-room will feel bad if it has a bad vibration, and I don’t want people to feel bad. I want people to feel good, because we are feeling bad enough already. So if you sell to a customer something that will torture him and that will not be positive to him, that’s selfish. There are many ways of saying things to the public in art, but in painting it is not that way, for me it is not that way. I am not saying that painting should be a decorative element: it does have to be deep and transmit deep feelings, but not negative feelings. I think the artist shouldn’t be selfish, because we all have our dramas, but to put them into an artwork that another person is going to be living with is, for me, something of utter selfishness. They may me call me shallow or snobbish, but that’s what I think.

The computer, a tiny magic box.

 

Why do you think they said you were shallow or snobbish?

First of all out of envy, because I do what I want. For example, for an Ophtalmology Congress, they told me: “Make something for an International Congress”, and I did. Or they challenged me to make spheres out of boxes. In other occasion, the italian brand Alessi, that builds home appliances in steel and plastic, asked me to decorate a flower vase made by Mendini, that looks like a flower vase when you remove its cap and looks like an artwork when you put it back on. The interesting things is that they realized that I could make the vases before they produced them industrially. I made them before they went to the production line, because I work three-dimensionally, so, when they saw that, they thought of making 100 photographic designs and doing a test with the public to see if people liked them. After that, I was commisioned to make a video and a mural painting with 10.000 designs, all computer generated and three-dimensional.

 

After our first encounter, when we talked about what art is, I was left thinking about the subject and it made me re-read a book by Larry Shiner, who says that in the beginning of History, there were other categories for defining art and there was no separation between artist and artisan. 

Okay, what’s the difference between an artist and a craftsman? The craftsman makes the work, the artist creates it.

 

In the Antiquity, within the concept of art, there was the art of making shoes, the art of healing…

Everything is art, because art is passion. You have to have passion for what you do.

There are people that criticize you just because they can, they don’t have much knowledge and say “this artist is too comercial”, but in earlier times art was also produced for making money. I will name one among many others: Leonardo. He worked by commision, like many others. Patronage disappears in the seventeenth century, in the Netherlands, and the art market is born. The art critics cannot ignore that fact.

That’s the way it is. In fact, I feel very related to Leonardo, and though I don’t mean to say I’m a Leonardo of the 21^st century, the thing is that I don’t sense a conflict between arts and the science of technology, because they go hand in hand, and the same thing happened to him. He was a person that could make a painting and could also make a helicopter, and he wasn’t criticized. Instead, the complete opposite happened.

Exactly, also because he invented plenty of things that are not very well-known nowadays…

I know them because there’s a museum dedicated to him in Milan and I had to do all the technical work there, with TV’s, texts and interactive technologies.

Leonardo was a scholar. For example, in the way he described the human body. We’re lucky he was allowed to do so, because in that time the Church could send anyone to the bonfire. I don’t have that conflict. The computer is an instrument, what happens now is that people used to see the computer as a strange thing that could compete with the artist’s technique and finally it didn’t happen. The computer is an instrument like any other. It is a magic box, because from the point of view of aesthetics you have 256.000 simultaneous colors and when combined you have 60 million. And then you have three-dimension. I learnt a lot of lighting through three-dimension, because it is important to know how to light an object, since it changes radically with light. To be able to manage this subject I studied chromatics, but what I learnt by lighting objects with my computer through the point of view of color, I learnt it by myself.

It may seem an obvious question, but it is not: What can you say about your artworks’ message?

First, that it is impossible not to send out a message. How can you not give a message? If you make an artwork and show it, you’re saying something. The sphere is a reaction against the square. The curved shape is more sensual, it has more to do with East than West and it has more to do with women than with men. Why is Venice so beautiful? Because you can find a harmony between the East and the West there. Eastern art is geometric. Italy has a bit of everything, because it was an invaded peninsula, so you can find wonderful things every20 kilometers.  In this time the truth is that, from an artistic point of view, Italy is in decline. I like Italy for fashion, for design, but its art is in decline.

 

I was still thinking in this sixty monitors you put in your show. My first interpretation was “we live in an era invaded by image”

That was what happened to you, some other people entered and said “Where are the paintings?”. How can I put 650 works in the walls? Lots of them are huge, and there are many others that I don’t even have with me anymore. In every monitor there were three videos, then there was a room where we screened films on how the works were made. On the other side there was a dark room with lighted sculptures that interacted with the public. That was a magic thing, I don’t even know now how I did that.

As a matter of fact, Lacan says: “I am where I don’t think”. It throws Cartesian logics away and invites us to know the subject of the unconscious.

That’s interesting. If you look on the Internet you’ll find many things about that subject, and also about the meaning of the sphere and its connection with Buddhism.  It is an object that has been used for centuries, through the religions elites, not only there but in the logias, the Masonry, for example. Some time ago a friend of mine came to see the show and he told me “The sphere is Buddha and you are Buddha”. I thought: “This man is crazy”. Then, the day after, he brought me a Buddha with a sphere in its hand and I felt something was happening there, so I started to do some research on Buddha and the sphere: there were direct connections, things that would take months to study.

Well, the sphere represents a whole and perfect body, and us, the humans, are structurally lacking. What are your projects for 2012?

On January 3^rd I have a show about the eye, which is round. Once I did a show about flowers, the human eye has a limit and thanks to the technology we can overcome that limit, so I got inside a flower with a macro camera and discovered a whole universe. Now I discovered it in the eye, because all eyes are different and unique, in fact they were once thought of as a possible replacement of digital imprints.

 

It is really interesting that you choose eyes, because through them we see and we are seen. According to psychoanalisis, the scopic pulsion circulates around there.

Yes, there is a very interesting thing that I once learnt, to enter the fourth dimension. You go to the bathroom, turn the lights off and your whole personality appears, past, present and future. There are people that freak out and run.  In that moment you can see your demons, your angels, your negative part and your positive part. But, you know what’s interesting? You can tell all your different characters that you want a certain thing, and therefore the conflict between them dissappears. It is not a thing anyone could do: some time ago I told a friend that if he wanted to experiment the fourth dimension he should do it. He entered the bathroom and did it, and got out shouting and screaming.

The fact of looking at yourself and seeing yourself is very interesting. I did a work out of it, it’s called “History of a Misunderstanding”, because one judges people and says “This person is that way”. That person is surely that way, but he should be many other ways too. People judge out of first impressions and that’s very banal, very shallow. That’s why I’m telling you that the works I do have a message and a meaning that can only be seen by certain people.

Thanks a lot for your time.

In Eduardo Pla’s workshop I was able to appreciate how he turns his ideas into artworks. He showed me the construction process of the Moebius strip in the shape of an illuminated water fountain, made in 2008, that won the National First Prize of Sculpture. We also talked about the influence and admiration he feels towards M.C. Escher and the homage he paid to him in Venice. We also watched the videos that show how his retrospective of 40 years of work was made, and that he kindly gave to us so that we could have them in our portal.

I left the interview thinking in his work “History of a Misunderstanding”, a name that reminds me of psychoanalitical  concepts related to the spoken word. Once again, I thought about the concept of Art trying to understand the subject a bit better so that I could grasp the artistic production of Pla’s multifaceted style.

While I walked, the summer breeze enveloped me. It was sunset and I heard a distant music where the sound of Marcel Duchamp’s laughter seemed to echo, mockingly saying: “It is only in arts that the man is capable of trascending the animal state, because art is an open gate to regions that are not ruled by time and space”

References:

SHINER, Larry: The Invention of Art. A Cultural History. (La Invención del Arte. Una Historia Cultural) Barcelona-Buenos Aires: Paidós, 2004.

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