Hay un niño solitario en el espacio, atrapado en una cápsula. Se llama Dubicel y desconoce el porqué de su condición. Anhela abrir la puertas de su prisión estelar y descubrir qué hay más allá de su pequeño universo. Este personaje, además, tiene un poder asombroso: puede materializar objetos que ve en sus sueños. Una noche, en uno de esos sueños, encuentra finalmente la llave de su libertad. En diálogo con El Gran Otro, Mauro Escobar nos cuenta de qué se trata el cortometraje platense en stop motion que está dando la vuelta al mundo.

 

Mauro es fotógrafo, nació en Zapala, Neuquén, y hace mucho que se considera platense por adopción. Hace más de una década, en el marco de un taller de redacción, escribió la historia de este niño atrapado en un domo espacial sin saber que años después su idea se convertiría en el fenómeno audiovisual que hoy cosecha aplausos y premios alrededor del mundo.

Yashira Jordán, nacida en Bolivia y también platense adoptiva, estaba en búsqueda de una buena narración para encarar un proyecto nuevo. Fue entonces cuando su amigo Mauro le presentó a Dubicel. Jordán quedó, de inmediato, fascinada. Convocó a sus colegas de Celeste Estudio Creativo y se abocó a la tarea de transformar esa historia en un cortometraje. El formato escogido: stop motion. Veremos más adelante el porqué de esta elección

Breve paréntesis: el stop motion o animación en volumen, es una técnica de animación que genera la ilusión de movimiento de objetos por medio de una sucesión de imágenes fijas. Tiene un gran componente artesanal, ya que la disposición de los objetos en cada una de las fotografías que forman la ilusión de movimiento se realiza manualmente y de manera progresiva, utilizando todo tipo de materiales. Es una técnica trabajosa y no muy barata, lo que explicaría su escasa utilización en América Latina.

 

 

 

Foto por foto, la creación de Dubicel

En la Argentina, el stop motion es una técnica que ha sido utilizada ya en publicidad y cine, pero que no cuenta con un gran desarrollo, debido a los costos que implica. De todos modos, existen varios referentes en el país, como Can Can Club, Tatanka y el reconocido Juan Pablo Zaramella. Además existe el Bit Bang Fest, un festival nacional de animación, videojuegos y arte digital que está ganando un reconocimiento cada vez mayor.

La vocación creativa de Celeste Estudio, fundado en 2011 por Yashira Jordán, Ezequiel Suárez Creck y Ezequiel Gonzales, es digna de ser destacada. Fue Celeste la institución que impulsó el lanzamiento, entre otros proyectos, del Taller Latinoamericano de Stop Motion, que se ha llevado a cabo tanto en la Argentina como en Bolivia.

De allí surgió Belisario, una producción de CGI (imágenes digitales) realizada para y con el Planetario Ciudad de La Plata, que ostenta el título de ser la primera producción fulldome (360 grados) de América Latina.

Celeste Estudio Creativo recibió también varios premios por su corto Anacronte, realizado en conjunto Mr. Bug (Argentina) y Exodo (México).

Teniendo en cuenta la complejidad que implica trabajar con stop motion, preguntamos a Mauro Escobar el porqué de esta elección. Esto nos dice:

«Elegimos esta técnica porque es una de las más atractivas y más ambiciosas en cuanto a producción. Y, como Celeste Estudio ya venía trabajando distintos tipos de animación (2D y 3D) para sus clientes, surgió la idea de incorporar un producto que también fuera un desafío para todes, ya que es el primer trabajo en stop motion de varios miembros del equipo».

 

 

Los doce minutos que dura el corto demandaron un año de preproducción, otro año de rodaje y casi cuatro años de postproducción. Participaron decenas de profesionales, como el productor ejecutivo Maximilano Aceto, y el producto final no podría ser más bello.

«Realmente – cuenta Escobar – fue dificilísimo. Había que hacer decorados, diseños de interiores, de vestuario, iluminación, actuaciones y movimientos de cámara. Todo un desafío. Dubicel es, igualmente, una mezcla de stop motion con 2D: su lugar, su mundo real y sus acciones fueron realizadas en stop motion, mientras que sus sueños fueron hechos en animación 2D».

El cortometraje cautiva, no solo por su técnica sino también por su relato. Tal es así que el músico y compositor Kevin Johansen se enamoró del producto y aportó, ad honorem, la voz en off del cortometraje.

Celeste Estudio asumió la producción en asociación con el Estudio Polar, de México, y el Planetario Ciudad de La Plata, donde Dubicel se proyecta habitualmente junto al mencionado Belisario. La mezcla de sonido, por otro lado, por la platense Sync Comunicación Audiovisual. Además, fue coproducido con UCRONO y contó con la producción asociada de Árbol Cine Orgánico, NFGames y Synergia 3 Coworking.

«El resultado – comenta Mauro – fue sorprendente. A sala llena, niñes y grandes pudieron disfrutar de nuestro corto y las opiniones fueron increíbles, diversas. Fue muy emotivo para nosotres».

Representando tanto a la Argentina como a Bolivia (su patria natal), Yashira llevó el corto al Annecy International Animation Film Festival, el más antiguo y prestigioso festival de animación del mundo, donde Dubiel fue exhibido junto a producciones de gigantes de la industria como Nickelodeon, Epson, Cartoon Network.

Además, participó en el Golden Nugget International Film Festival 2019, el ICONA 2019 (Animation Festival), el White Deer International Film Festival 2020, el Our Fest 2020, el Buenos Aires International Film Festival 2020 y los New York Cinematography Awards 2020, donde se consagró Mejor Filme de Animación.

Pero si hablamos de premios, nos vemos obligados a reseñar especialmente a la banda sonora de Dubicel y a su autora, Micaela Carballo.

 

 

De Bratislava a La Plata

A comienzos de este año Dubicel se presentó en los New York Cinematograpy Awards (NYCA), donde ganó dos premios: Mejor Film de Animación y Mejor Banda Sonora Original.

Micaela Carballo, encargada de la composición musical, encaró este proyecto como su trabajo de tesis en el marco de un Máster en Composición de Bandas Sonoras en la Escola Superior de Música de Catalunya. La grabación fue interpretada y grabada por la Bratislava Symphony Orchestra, de Eslovaquia, y el resultado se tradujo en una obra impresionante que no para de cosechar premios.

A fines del año pasado, Dubicel fue galardonado con el premio al Mejor Soundtrack en la presentación del Golden Nugget International Film Festival (GNIFF) en Londres. También se llevó el premio a la mejor banda sonora en el Buenos Aires International Film Festival.

En marzo de 2020 la Camerata Argentina de Mujeres, bajo la dirección de Lucía Zicos, brindó un concierto en el Centro Cultural Kirchner de la ciudad de Buenos Aires en el marco de Nosotras movemos el mundo, una serie de eventos organizados por el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación en conjunto con el Ministerio de Cultura argentino, como parte de las celebraciones del Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras.

El corto, además, fue seleccionado para la competencia oficial del Our Fest, un festival internacional de cine de animación en stop motion que se realiza en marzo en Buenos Aires.

 

 

Dubicel y la posibilidad de abrir la cápsula

Tal como el niño en la cápsula, Mauro Escobar lucha por materializar sus sueños y ampliar horizontes. Como fotógrafo, iluminador, camarógrafo y director de fotografía, el patagónico-platense ha trabajado en diversas producciones en los más variados proyectos. Desde hace cinco años forma parte del área audiovisual de la Universidad Arturo Jauretche y pese a que reconoce el retroceso que ha sufrido esta industria en los últimos años, confía en que se vienen tiempos mejores:

«Como muchos colegas, creo que las industrias audiovisuales nacionales, la productividad y la diversidad en los enfoque y prioridades sufrieron un desgaste y un deterioro notables. Sin embargo, esperamos tiempos mejores. Producir en este país siempre costó muchísimo, aunque hay algunas señales positivas. La reapertura de Tecnópolis y el regreso de Paka-Paka, por ejemplo, demuestran una intención de volver a apostar por un desarrollo audiovisual nacional de calidad».

Fueron años difíciles para la industria audiovisual, es cierto, pero de todos modos Dubicel salió a la luz y está, en estos momentos, conquistando festivales alrededor del mundo, demostrando que los sueños pueden materializarse y que la cápsula, ese universo de posibilidades, puede ser abierta.

«Una de las cosas que más me gustan de Dubicel – reflexiona Escobar – es que se nutre de acciones. El personaje no habla, pero se mueve, gesticula, busca, llora y se ríe. Por eso, siento que este cortometraje invita constantemente a los espectadores a imaginar lo que sucede, todo el tiempo. En sus sueños encontramos otros mundos imaginarios, que son realmente muy ricos en cuanto a fantasía. Dubicel, con sus mundos y sus sueños, nos permite seguir imaginando y nos regala un abanico infinito de aventuras por descubrir».

Mauro viene del mundo de la imagen. Anda siempre con una cámara en la mano, pero, en sus propias palabras: «mi amor por el arte es lo que lleva a encarar otras búsquedas». Dentro del ámbito audiovisual de la Universidad Arturo Jauretche, Escobar está abriendo una nueva etapa en su vida profesional: la producción. Pero pese a que la vida sigue y nuevos proyectos ocupan sus días, el niño de la cápsula que materializa sueños seguirá siendo un motivo de orgullo y, en cierto modo, un punto de inflexión.

Dubicel puede verse con regularidad en el Planetario Ciudad de La Plata y estará presente, además, en varios festivales alrededor del mundo. Para enterarte en cuáles, seguí a Celeste Estudio Creativo en las redes sociales.

Para seguir, por otro lado, los proyectos de Mauro Escobar, no hace falta mucho esfuerzo. Basta con salir de la cápsula y tener en cuenta que los sueños, como los cortometrajes, suelen empezar con una idea y que el que abandona, no tiene premio.

 

 

EQUIPO TÉCNICO
Dirección, Guión y Producción: Yashira Jordán
Producción Ejecutiva: Maximilaino Aceto
Coordinación, Coguionista y Dirección de Animación: Igor Gopkalo Streiff
Dirección de Arte: Matias Paradela
Dirección de Fotografía y coguionista: Mauro Escobar
Guión Literario: Anamaría Aguirre Chourio
Composición Musical: Micaela Carballo
Jefa de Producción: Mariela Barcos
Asistentes de Producción: Catalina Galmán, Tamara Montero
Making Of y Asistente de Fotografías: Juan Pablo Ojeda
Construcción de Puppets, Props y Escenografía: Ezequiel Suárez Greck, Jeremías Morello, Matías Bellusci, Alga Marina Barriga Cano
Diseñadores Industriales: Esteban Cursio, Diego Krause
Vestuario: Laura Abba
Directora Creativa y Diseño Visual: Guadalupe Rodríguez
Comunicación y Social Media: Rocío Palacios
Productores asociados: Ezequiel González, Ezequiel Suárez Greck, Daniela Scelsio, Esteban Cursio, Pablo Javier Santamaría, Mariana Gutierrez, Maximiliano Aceto, Ucrono, Árbol Cine Orgánico, Planetario Ciudad de La Plata, Synergia3 Coworking Lab (Julián González y Pablo Alemán), New Focus Games
Impresiones 3D: Juan Francisco Páez, UCRONO
Asistentes de Arte: Priscila Castaño, Leda Trenco, Martín Marino, Yashira Jordán, Luisina Fucile, Jeremías Morello, Guadalupe Rodríguez, Juan Pablo Ojeda, Bernarda del Potro, Jimena Zuazo
Sitio Web y Aplicaciones Multimedia: New Focus Games
Colaboradores: Dante Sorgentini, Juan Pablo Zaramella, Walter Tournier

CONTACTOS
Celeste Estudio Creativo
Página: www.facebook.com/celesteestudiocreativo
Contacto: info@celesteestudio.com

Mauro Escobar
Reel: https://www.youtube.com/watch?v=Y8S9Hj5q5R4
Contacto: fotomauroescobar82@gmail.com

Imágenes Cortesía de Mauro Escobar y Celeste Estudio Creativo

 

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